sábado, febrero 18, 2006

Gorda

Estoy ya tocando un poco fondo. Mi imagen empieza a ser seriamente lamentable. A continuación, lista de artículos que me compré el miércoles pasado para comer mientras estudio (hasta el día 28 de febrero) y que hoy sábado ya me he zampado en su totalidad:

  • 2 bolsas de Doritos Tex-Mex (los naranjas).
  • 2 bolsas de Ruffles York'eso.
  • 2 bolsas de Lays Receta Campesina.
  • 2 paquetes de Donettes Rayados.
  • 4 paquetes de Filipinos blancos (en su versión cutre de %Dia, que se llaman Choco-aros)
  • 6 tabletas de chocolate blanco
  • 2 botes de megamix de aceitunas y pepinillos.
  • 3 bolsas de una especie de PapaDeltas sabor ketchup marca %Dia también.
  • 1 Kit-Kat
  • 1 paquete de dos Donuts Fondant.
  • 6 litros de Coca-cola
  • Infinitos paquetes de Ducados Rubios

En total creo que la suma asciende a unos 400 millones de kilocalorías, y que debo haber engordado aproximadamente dos quintales. Me he comido el equivalente a las fiestas infantiles de los cumpleaños de todos los amigos de mi sobrino. ¿Tengo ansiedad o algo?

Como contrapartida, como no salgo nada estoy ahorrando un huevo y en cuanto acabe me apunto al gimnasio y me voy a tirar las tardes enteras levantando pesas hasta convertir mis lorzas en músculos esculpidos en acero y roca... En serio, es muy fuerte, algo tengo que hacer, porque el balance de exámenes está siendo fatal para mi línea. Mi uniforme oficial de moderno me cabe ahora en una oreja, y yo ya no se ni con qué me voy a vestir...

Hasta aquí puedo leer.

Besos en las ingles

martes, febrero 14, 2006

Regular

Ya he salido del examen. Me ha salido regular. Tengo posibilidades de aprobar, pero dependo un poco de la benevolencia de los profesores, y la verdad es que la benevolencia es un bien bastante escaso entre los integrantes del departamento de Ingeniería Química. Lo de siempre, falto de tiempo. No me ha dado tiempo a hacer una gráfica con la que se hace todo un ejercicio (de los dos que había) y sólo he podido poner el procedimiento de cálculo para resolver el problema, pero sin resolver nada en realidad. Ahora me queda esperar que me dejen arañar algún puntillo por ese ejercicio, y entonces si que podría aprobar... En fin, que ya os iría contando.

En otro orden de cosas, resulta que me van a posponer un examen, probablemente hasta el 28 de febrero o incluso primeros de marzo, con lo cual voy a tener más tiempo de estudiármelo, aunque por otro lado, el nivel de hastalapollismo que puedo llegar para eses entonces no me lo quiero ni imaginar... Este "último empujón" del que todos hablan se me está haciendo eterno...

Pues eso, que hasta aquí puedo leer. Anda que os quejareis... dos (mini)posts en el mismo día. Dónde se ha visto eso, eh?

Besos en las ingles.

Alea jacta est

A las 11:55 del día 14 de febrero de 2006 doy por finalizado mi estudio de las Operaciones de Separación I, la asignatura más difícil de toda la carrera. A las 16:00 se decide todo. La suerte está echada. Alea jacta est. Estoy que me jiño por las ancas pa abajo...

Feliz Día de los Enamorados. Besos en las ingles.

jueves, febrero 09, 2006

Pide la hoja de reclamaciones. Yo estoy harta de hacerlo.

La rutina de mi últimos días se ha visto hoy alterada por un incidente en el autobús. No me he enterado muy bien de cómo ha empezado todo porque yo me hallaba aletargado y semimesmerizado por los temitas musicales de mi Aipoz de garrafón. De repente he empezado a oír voces inusualmente altas, así que he decidido salir de mi burbuja, me he quitado mis auriculares de orejeras, ochenteros pero con un toque actual, y he puesto la antena a ver si podía cogerle el hilo a la gresca.
Resulta que la cosa más o menos consistía en que una chica joven, con sus rastas pero muy aseada, nada perrofláutica, se había picado con el conductor porque le había preguntado no se qué de una calle o una parada y le había contestado que no lo sabía de malos modos. Me lo creo totalmente, porque me subo en el mismo autobús muchas veces y ese señor es bastante borde y bastante gilipollitas. El caso es que la chica ha decidido que el imbécil ese no le faltaba al respeto gratuitamente y le ha montado un pollo...
Como si de una reacción nuclear en cadena se tratara (o de una pelea de saloon de western americano, para los profanos en materia nuclear), la gente inmediatamente se ha puesto a comentar la jugada, las marujas se amotinaban, y todo el mundo tenía una anécdota al respecto que contar al desconocido de al lado. El efecto dominó.
De repente, la chica perdió el protagonismo, cuando una señora del fondo del coche se autoerigió líder de la revolución, y empezó a mascullarle que no tenía porqué permitir que ese tío le tratara mal. Repito sus palabras con la mayor fidelidad que puedo:
"Pídele la hoja de reclamaciones, que tenemos derecho a ella, lo que pasa es que
no lo sabemos, y por eso se aprovechan esos desgraciados. Pídesela, que yo lo he
hecho muchísimas veces, y le coges la matrícula y el número de coche y llamas a
la EMT y le montas el pollo. Verás como se le bajan los humos. Yo estoy harta de
hacerlo. Ayer mismo puse una queja. Pídesela y le pones una queja en la EMT. Yo
lo he hecho muchas veces. Pídesela, que funciona. Yo estoy harta de hacerlo. Si
quieres te doy el teléfono de la EMT, que lo tengo en el móvil, porque he
llamado muchas veces. Estoy harta de hacerlo
"
Pues bien, la chica se decidió a hacerlo, ella por primera vez, eso sí, y le pidió los datos al autobusero. Por supuesto, el hombre, ya de por sí con un carácter bastante agrio, se chinó mogollón y empezó a chillarle a la instigadora de su futuro despido diciéndole que no le insultara, que él no lo había hecho...
Total, que el tío, sólo por joder un poco al personal, coje, agarra, y con toda la ceremonia pone las luces de emergencia y se para en el carril de la derecha, para darle la hoja. Empieza a decir que tiene que hacer no se qué llamadas y que hasta después de una hora no podría arrancar. Fue en este punto cuando los pocos que estaban serenos en el coche se encendieron y empezaron a vociferar que no podía hacer eso y que arrancase o les dejase bajar, a lo que el tío contestaba que como no estaba en una parada no podía abrir las puertas. Estábamos técnicamente secuestrados Al tío se le había metido entre ceja y ceja joder al personal y hundirse con todo el equipo. El caería, pero nosotros caeríamos con él.
Al final, todos nos pusimos de acuerdo en poner una queja formal contra el neanderthal ese, y acabó achantándose y dejándonos bajar después de 10 minutos de encierro. Gracias a Dior vivo para contarlo. Ya pensaba que iba a acabar mis días entre marujas sindicalistas y niñas monas rastafaris. Me he acordado mucho de la historia que contó Farala en su blog sobre el motín que él vivió en el carril BUS-VAO de la carretera de La Coruña...
Cuando caminaba hacia casa analizando lo ocurrido, me he dado cuenta de que el telefonillo de mi portal estaba pitando escandalósamente. Esto no tendría nada de raro, teniendo en cuenta que mi telefonillo está estropeado sí y día también, si no fuera porque era el tercer portero automático que hacía lo mismo desde que salí del trabajo... ¿Tres telefonillos pitando en puntos distintos de la ciudad en menos de una hora? Qué raro... ¿Se tratará de un golpe de estado de los hackers patrios?, ¿la rebelión de los fonoportas? Habrá que esperar a ver que dicen de esto en Cuarto Milenio...
Besos en las ingles.
P.D: Ha ganado Pepe, pero ahora que está fuera de la casa me está cayendo un poco mal... Otro desengaño amoroso...

viernes, febrero 03, 2006

Ya era hora

Pues sí, ya era horita de decidirme a actualizar. Hace ya casi un mes que no informo sobre nada de mi vida y ya va tocando. La verdad es que no tengo nada realmente excitante que contar, aunque por otro lado, pocas veces cuento algo realmente excitante aquí, así que no creo que importe mucho. En realidad, ¿los blogs no van precisamente de eso, de interesarse por las pequeñas cosas de la vida cotidiana de un fulanito desconocido? Pues eso.

Este último mes lo he pasado dentro de la rutina más asquerosa. Todos los días levantarme para trabajar, hacer mi trabajo bien hecho (para qué voy a mentir, si lo hago bien lo hago bien... A mí es que hay que verme trabajar...), volver a casa, comer, echar una siestecilla a veces, otras simplemente relajarme, y ponerme a estudiar como un gilipollas hasta la noche, cuando me permito ver la tele o sentarme al ordenador. Y vuelta a empezar. Vamos, lo que se llama una existencia de mierda. Sí, ya se que es lo que hace todo el mundo que trabaja, pero a mi lo que realmente me mata es tener que estudiar. Si estuviese 10 horas al día trabajando no me importaría en absoluto, y eso que mis tareas no es que sean demasido fascinantes ni mentally challenging, pero sólo de pensar en meterme con esos apuntes rancios y amarillentos me produce urticaria...

Ya queda poco. El 20 de febrero acabo, pero cada vez se me hace más cuesta arriba... Además, en realidad nadie me garantiza que vaya a aprobar, con lo cual el horizonte se extiende hasta junio... Qué peressóóóóóón, peressón!!

Si tenemos que destacar algo de este último mes sería lo siguiente:

1. Conocer a Mordiscos de realidad. Este hombre me sacó del aburrimiento más atroz de una tarde de estudio para llevarme de paseo y pagármelo todo, como si fuera un servicio de escorting, vamos. Tampoco le salí muy caro porque cenamos en el Burger y tomamos copas en el Naranja, que son sitios de lo más económico que te puedes encontrar en Madrid, pero es de agradecer de todos modos. El hombre muy majetón y muy deportista él. Me contó unas historias sobre maratones absolutamente sobrecogedoras. Me reafirmo en mi creencia de que el deporte no es bueno.

2. He reducido mis bajadas a la calle a fumar un cigarro a sólo dos. Eso, sumado al cigarro de antes de entrar y el de después de salir, hacen un total de 4 cigarros en toda la mañana. Señores, esto para mí es todo un logro, y una preparación para mi abandono del tabaco para después de exámenes. Por tanto, quiero mi caramelito!!

3. Estoy enganchado no, lo siguiente, a Gran Hermano. Me trago todos los días un cachito del resumen y los jueves el programa entero, salga el sol por donde salga. Soy superfan de Pepe y me quiero casar con él, pero no se yo si va a ser posible. En cualquier caso, he descubierto con horror, que en mi recién estrenado pack Trío de Telefónica está incluido el canal GH 24 horas, así que ahora más que nunca tengo que tener temple y voluntad férrea para sacar horas de estudio en lugar de tirarme en el sofá a ver lo que hacen los 3 que quedan, que será bien poco.

4. Me he leído un libro infecto que se llama "Cómo hacer el amor igual que una estrella del porno", autobiografía de la insigne actriz porno Jenna Jameson. Si pensais que el título es caspa, esperad a leer el contenido, porque no tiene desperdicio. Lo más fuerte de todo es la traducción literal al español del libro, digna de haber sido realizada con google, con la función esa de traducir al castellano. Las construcciones gramaticales eran surrealistas y a menudo ni siquiera entendía que coño quería decir cada frase. Sólo os digo que "heavy metal fan" lo traducen como "fanático del metal pesado". Y ya está. ¿Qué te ha parecido esa, uhmm?

5. El domingo fui a ver a Yurena al Plan Travesti. Fue un espectáculo impresionante, culminado por el momento en el que se le cayó el micrófono y su melodiosa voz seguía sonando por su cuenta. La gente estaba enfervorizada, y a más de uno le cabía una sandía por el culo de lo que lo estaba gozando. Lo malo es que sólo cantó 4 ó 5 canciones, pero como es ella se lo perdonamos todo.

En fin, que no se que más contar. Además, teniendo en cuenta que estoy totalmente desentrenado en esto del noble arte de escribir, bastante es que haya llegado hasta aquí. Intentaré actualizar más a menudo pero no lo aseguro. En cualquier caso no desesperéis, volveré, como Yurena, y retomaré mis descacharrantes crónicas de la actualidad, con mi habitual sorna y sarcasmo. Soy genial, hasta en la vigilia...

Besos en las ingles.

P.D: Juan, ¿te quejarás de guiños a La Hora Chanante, eh? Has creado un monstruo...