Flat Eric: Oye, vamos a acabar ya que esto parece Cristal. Y deja ya de enviar mensajitos por Internet a gente que no te gusta, que esto es mucho más importante. Es muy fuerte lo tuyo.
Ann: Ya tío, perdona. Es que estoy un poco hormonal (que no hormonado). Dónde nos quedamos?
F: En realidad ésto es una repetición del post que hicimos anteayer y que debe andar perdido en el ciberespacio. Creo que ibas a hablar de aquella meretriz que nos ligamos en el cabaret, que usaba un perfume embriagador.
A: Ah, sí. La historia es que mientras cenábamos con el general, desde la otra punta del comedor, nos miraba con ojos tímidos a la par que golosos, a lo que nosotros contestábamos con sonrisitas y guiños de ojo (qué valor el nuestro).
F: Total que al final la fulana se vino a nuestra mesa buscando a su chico latino. El chulo vino a decirnos que la "tratáramos bien", mientras golpeaba con sus nudillos en la mesa, como quien dice "pagadle bien". Era su favorita. Le regalamos una flor y la sacamos a bailar unos lentos, y resultó que a la chica le cantaba el sobaco lo que es bastante, y a mí no se me ocurrió otra cosa que decirle que qué perfume tan bueno llevaba; ella no dio crédito ante mi osadía y se fue avergonzada. Tú también bailaste con ella no?
A: Yo casi vomito. Olía a cebolla chunga de no haberse lavado el alerón en un mes.
F: Es lo que tenía la prostitución en los años 50...
A: Desde luego quedaba muy auténtico. Después de esto fuimos invitados al reservado de Mandy y Pearl, las divas, que nos habían visto cenar con el general y sucumbieron a nuestro españolismo y nuestro charm.
F: Allí vimos cómo cantaba el cantante que te molaba, nos tomamos unas cuantas copas, nos hicimos fotos, cantamos flamenco (bueno, cantamos, qué valor también), dimos lecciones de español ("llévame esta noche, llévame contigo"), y nos lanzamos al estrellato del hotel.
A: Y como tú no habías tenido suficiente con rebañar el plato del general, nos fuimos a petardear un poco a Malmö, llenarnos la panza con mucha grasa, y de paso ver qué se cocía en la noche Malmöeña.
F: Se cocía más bien poco, porque hacía un frío indecente, así que tras ver que los garitos estaban a una distancia razonable como para coger un taxi, y ver que estábamos casi sin blanca, volvimos al redil a hacer un poco más el chorra. Entonces fue el momento cumbre de la noche: performance sólo para nuestros ojos.
A: Estábamos tú y yo, en los sillones de la recepción del hotel ya un poco acabados, cuando se nos sentaron Mandy y Pearl y comenzamos otra conversación absurda en la que nos inventábamos más de la mitad de lo que decíamos. Como ya iba quedando poca gente los actores estaban ociosos y cada vez más gente se fue incorporando a la conversación: Candy, el General, y demás cuchipandi. De repente vimos que se armó un revuelo que se saldó con la detención de un tío con sus gafas, su gabardina, su maletín y su pinta de espía de peli de espionaje.
F: El tío era un poco Pet Shop Boys en un vídeo que no me acuerdo cuál es pero era igualito (uno en que iban con perros). La cuestión es que en un momento nos dimos cuenta de que teníamos a la mitad del cast actuando y haciendo el paripé solo para nosotros: unos en persona, y otros tantos en la sala de interrogatorios dando una paliza ficticia al espía, que veíamos a través de un televisor.
A: Prácticamente una función privada para nosotros, el sueño de cualquier espectador.
F: Y tal como llegamos, pero infinitamente más famosos y encantadores, nos fuimos de allí, porque el tema de hacer noche estaba complicado (debíamos dormir en el restaurante -&%#"§??!!- y eso no tenía visos de vaciarse en ningún momento). Nos dimos media vuelta y nos fuimos a casa, charlando por el camino sobre lo arriesgado del concepto del espectáculo: tiene que ser agotador para los actores estar actuando durante 24 horas, 10 días seguidos; incluso cuando no hay nadie delante. Tú crees que funcionaría en España?
A: No, jlaramente no, porque en España en el segundo día ya habrían violado a la mitad de reparto femenino, y habrían robado todo el atrezzo. Sin embargo se lo voy a proponer a Sergio, para ver si se le activa la vena insensata-megalómana-suicida y retoma NoHayQuorum, porque somos muchos y nos podemos permitir unas cuantas bajas.
F: Sí, bueno, tampoco pierdas de vista a los suecos que el quinto día por lo visto se pillaron un pedo bastante curioso y asaltaron el Hotel, llevándose de todo (sólo objetos y mobiliario). Resultado: el bar tuvo que cerrar y se dejaron de servir bebidas alcohólicas.
A: Y esto es todo amigos. Como esta va a a ser la primera y la última colaboración que hagamos, so pena de acabar dejándonos de hablar, ha sido un placer crosovear contigo pero una y no más Santo Tomás. Cada uno en su blog y Dios en el de todos. Y ya está. Y recuerdos a la Vaca Ator, que la echo mucho de menos. Y a Poncho.
F: Sí, efectivamente trabajar contigo ha sido un auténtico calvario y ya he tenido suficiente, así que comienzo la Semana Santa totalmente redimido de mis pecados. No duden en sintonizar sus blogs amigos.
Nota: nos queremos ir de viaje a alguna capital europea. Alguna recomendación?Berlin/Amsterdam/Hamburgo/Bruselas/Frankfurt
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